Karim Leklou. Laetitia Dosch. Sara Giraudeau. Bertrand Belin. Andranic Manet. Noee Abita. Robinson Stevenin. Mireille Herbstmeyer. Eol Personne
Es extraño encontrar una película que hable de la bondad de una forma tan transparente, y es de agradecer que lo haga vinculando la figura del protagonista a la categoría de la paternidad ( sobre todo para los que somos padres ).
Aymeric es un joven sin demasiado éxito pero tampoco demasiadas preocupaciones, que decidirá adoptar emocionalmente al hijo de su pareja, a quien conocerá ya en un avanzado estado de gestación.
Su entrega será absoluta durante la infancia, ocupando la mayor parte de su tiempo. Pero las cosas se complican con su pareja y finalmente, padre e hijo no podrán seguir tan unidos como ambos esperaban.
A pesar del volumen de su sufrimiento Aymeric nunca llevará a cabo ninguna acción que pueda causar dolor a quienes tienen cerca, a pesar de desearlo en algún momento. Ser padre, parece decirnos, sea biológico o no, no debe de admitir fisuras, tampoco el amor: o se quiere o no se quiere.
Pero además, los hermanos Larrieu acometen un objetivo que parece anacrónico hoy en día y es hablarnos de las virtudes de la vida sencilla, un alegato encantador a vivir acorde con las necesidades de cada uno, limitando las ambiciones y dándole a la felicidad la entidad correcta. Nuestro protagonista vive encadenando trabajos temporales y no por ello nos habla de amargura o precariedad, nunca ha viajado lejos y sin embargo su vida para el es apasionante y plena. Aymeric, y eso es lo relevante, no es Forrest Gump, no es un hombre de inteligencia limitada, ni socialmente apocado, sino sencillamente una persona que es capaz de vivir la vida en su esencia siendo consciente de que eso tiene mucho que ver con lo felices que podamos hacer a los demás.
El mensaje de La vida de Jim es precioso, su guion consigue dibujar unos personajes complejos y huir de la tentación del melodrama, y su caligrafía es inteligente y avanza perfectamente entre elipsis.
En definitiva, una delicia humanista muy disfrutable y, además, aconsejable para cualquiera con ganas de sentirse bien. Ya, que además aprendamos algo, eso es otra cosa.
Público
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