Benjamin Lavernhe. Pierre Lottin. Sarah Suco. Nathalie Desrumaux. Stephanie Ciquennois. Ludmila Mikael.
Thibault es un reconocido director de orquesta al que detectan un tumor al que podría sobrevivir con un trasplante de médula compatible. La búsqueda le llevará a conocer a un hermano cuya existencia desconocía y cuya vida es muy diferente. Eso sí, hay algo que los une a los dos aunque a distintos niveles: su pasión por la música.
La historia que nos cuenta Courcol, podría dar lugar a una comedia de equívocos o a un melodrama lacrimógeno. Sin embargo, no se va por lo fácil.
Lo que de verdad es importante aquí son los personajes y su relación, como cada uno va descubriendo a través del inesperado encuentro, la fragilidad de su destino, que hubiese podido ser totalmente diferente. Y si el pasado habría podido ser otro, quizás lo pueda ser el futuro.
Lo importante de Por todo lo alto es su solidez. Lo es en su escritura y lo es en su forma de contar. Además, los dos actores protagonistas hacen un magnífico ejercicio de empatía, tanto entre ellos como con el público.
Con todo esto, la película tiene muchos momentos a recordar, fundamentalmente por su humanidad, y además, se permite un final festivo que nos recuerda que tenemos derecho a pedirle a cualquier película que nos emocione aunque sea en forma aparentemente superficial.
Una gozada.
Público
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