Director.-
Paula Paz
Intérpretes.-
Eva Rufo. Jesús Noguero. Esperanza Elipe. Javier Lago. Rebeca Hernando.
Todos los que nos hemos interesado por este estreno lo hemos
leído: Susan Glaspell fue una dramaturga americana de los años 20, merecedora
del Pulitzer pero que, sin razón aparente, nunca se ha estrenado en nuestro
país, tampoco me suena ver sus obras en Londres o Nueva York. Sencillamente es
una escritora que ha desaparecido mientras O’Neill, Williams o Miller,
cimentaban las bases del teatro americano al que ella había servido de pionera.
Porque una vez conocida Bernice, tengo la sensación de que
es un puente entre el teatro europeo de Ibsen y los antes citados. Esas obras
que, con apariencia de melodrama, planteaban necesarias reflexiones sobre la
condición humana. Es teatro al modo clásico, teatro de texto. Y así lo ha
entendido y respetado Paula Paz, la directora de este montaje.
Bernice es el protagonista ausente, acaba de fallecer cuando
la función comienza, e intentar entender su muerte será el dilema en el que se
moverán los dos personajes principales. La obra habla, sí, del amor, también de
la derrota y, sobre todo, del poder. Sorprende la clarividencia de su autora y
su valentía si colocamos la pieza en el tiempo en que fue escrita. Creo que
esto sí es feminismo, del de verdad.
La puesta en escena, potencia en este caso el texto.
En primer lugar, algo que me alegra mucho es que la Sala
Margarita Xirgu del Teatro Español ha dejado de ser en esencia la “sala
pequeña” donde se representan piezas experimentales o menores. En este caso,
Bernice podría haber estado en cualquier otro lugar, llenándolo con su volumen,
y la magnífica dirección artística, engrandece el escenario mucho más de lo que
nunca habíamos visto hasta ahora.
Como he dicho antes, la directora respeta mucho el material,
y lo escucha. Son pocas sus intervenciones : esos intermedios melancólicos y
musicales que separan los distintos actos, la evolución en vestuario y fondo de
noticias en la radio que actualiza el conflicto acercándolo… Son toques
acertados dentro del clasicismo sin complejos.
He disfrutado mucho de Bernice, me ha ayudado a ello la
magnífica interpretación de Eva Rufo y del resto del elenco, pero sobre todo he
tenido la agradable sensación de estar viendo buen teatro “de siempre”, un buen
texto presentado con indudable calidad, y además, he recorrido el conflicto
moral que plantea. Llamadme viejuno pero eso es algo que me gusta, me gusta
mucho.
Un verdadero hallazgo.
Público
Comentarios