Anagrama
590 páginas
Disponible en ebook
Del grupo de escritores ingleses en el catálogo de Anagrama, y que parecen ser referente en lo que se refiere a literatura británica actual ( Barnes, Iziguro, Kureishi... ) creo que McEwan es mi favorito, partiendo de que todos me gustan mucho por lo general.
Expiación, Sábado.... son para mi referencias de novelas casi perfectas tanto desde el punto de vista narrativo como en lo que se refiere a contenido.
No sé si es demasiado contundente decir que Lecciones puede ser su novela más ambiciosa. En cualquier caso, sí es la más amplia, tanto en el tiempo que recorre como en los asuntos que trata, a fin de cuentas es, nada menos, que la novela de una vida.
Todo comienza cuando la mujer de Roland le abandona dejándole solo con un bebe recién nacido, Lawerence. Tras asegurarse, con ayuda de la policía, de que se trata de una desaparición voluntaria, la narración se pone en marcha desde ahí, caminando hacia el futuro, pero también hacia el pasado, de forma en apariencia desordenada. La elipsis se convierte en un recurso constante y la novela podría convertirse en algunos tramos en un homenaje constante a la magdalena de Proust.
McEwan establece como tronco de su libro, un personaje central que podría considerarse como un ejemplo del ciudadano europeo ( o quizás británico ) que ha vivido en tiempos de paz, con un nivel de autoexigencia muy limitado y capaz de abandonar cualquier asomo de éxito, tanto por sus propias capacidades como por aquellas oportunidades que se hubieran ido presentando en su camino. Conocemos aquellas cosas que le han afectado y han cambiado su dirección, incluso en algún tramo, podemos reflexionar sobre los universos paralelos. Su despertar sexual, su respuesta ante la paternidad, su posición frente a conflictos internacionales.... Quizás es el ejemplo de ser humano que se deja llevar por las circunstancias y cuya vida no dejará como rastro nada demasiado memorable. Pero también un ser humano capaz de amar, de dudar y de sufrir, de aceptar sobre todo, de rebelarse muy poco, de disfrutar y temer ¿ no somos todos así en algunas ocasiones?. Y que de repente se encuentra con más de setenta años y siendo el núcleo de un amplio grupo familiar.
El autor va más allá, y junto con el retrato íntimo del protagonista y quienes le rodean, nos plantea un cuadro más amplio, el del mundo que va desde la construcción del muro de Berlín ( ya que también algunos de sus antepasados tienen su parte en la historia ) hasta la pandemia y los días de confinamiento y cuarentena. Y lo hace incluyendo la reflexión en algunos tramos.
Como he anunciado al principio, McEwan toca muchísimas cosas, y como siempre me ocurre en historias tan diversas, hay algunas que me gustan y me interesan más que otras. De hecho podría decirse que hay algunos momentos de disgresión, pero también que, en la mayoría de sus páginas, Lecciones contiene muchas de las mejores escritas por el autor.
Narrar casi un siglo de historia es algo muy ambicioso, y el resultado es brutal e íntimo, emocionante e inteligente. Creo que siendo justos, y en función de lo dicho en el párrafo anterior..... en lugar de un diez, le daría un nueve y medio. Nada, que McEwan sigue siendo mi favorito. Y Lecciones se confirma como una crónica comprometida de como las personas normales formamos parte de la Historia, algo que, en tantas ocasiones, nos parece tan lejano.
Público
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