452 páginas
Disponible en ebook.
He leído este libro con más lentitud de la habitual. No ha sido por aburrimiento, ni porque no lo estuviese disfrutando, todo lo contrario, la Trilogía de Copenhague me parece un libro único, fantástico. Lo he leído con lentitud porque tenía la sensación de que era el tiempo que me pedía su prosa, no me exigía nada, sólo me regalaba serenidad.
En primera persona, Tove Ditlevsen, nos cuenta gran parte de su vida estructurada en tres partes. La primera, la de su infancia, es una muestra de poesía sencilla y delicada, capaz de trascender la sordidez del entorno para mantener la magia del descubrimiento de los primeros años. Un prodigio de escritura, la palabra como herramienta capaz de dibujar una realidad.
La segunda, la juventud es su construcción como ser humano, su persecución del sueño de publicar, sus primeros amores, sus primeros pasos en el futuro. El texto de Ditlevsen, es capaz de despegarse ligeramente del precioso extrañamiento de los primeros años para adentrarse en la textura de la crónica, pero el tránsito es suave, sin costuras, y sí, nos retrata una sociedad, la clase obrera en los tiempos previos a la Segunda Guerra Mundial.
Inesperadamente, la tercera parte, Dependencia, la más larga de las tres, dividida a su vez en dos secciones, es la confesión más dura, aquella en que la autora tiene que enfrentarse a sus adicciones, no sólo el amor. Ya es famosa, con apenas 25 años, publica lo que escribe y resulta atractiva a los hombres. Y sin embargo, está herida de falta de felicidad, de esa soledad que le hemos conocido desde que tiene uso de razón.
Me he sentido dentro de esta trilogía, desde el inicio. Sorprendido porque desconocía totalmente a su autora, pero también sorprendido porque algo en apariencia tan sencillo haya podido llegarme tan hondo. Si fuese una película, creo que esta obra sería contada a la cámara frontalmente, porque lo que hace que sea difícil sustraerse, es su transparencia. Ditlevsen no esconde nada, y ni siquiera establece opinión, sólo está su mirada y nos la regala con lo que entendemos es algo tan importante como la verdad.
El tiempo pasa por sus páginas. En estas cuatrocientas he recorrido años, al lado de un ser humano, compartiendo su descubrimiento de lo que es la vida. Hay vida aquí, vida pura, pura vida.
No conocía, ya lo he dicho, a Tove Ditlevsen. Estoy deseando ponerme a buscar lo que hay publicado. Trilogía de Copenhague se ha convertido en uno de mis libros inolvidables.
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Público
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