Documental.
Narradora: Helena Bonham Carter
Como se maneja la verdad, ¿ estamos preparados? después de tantas historias, novelas, películas, incluso aquellas que están "basadas en hechos reales", ¿ estamos preparados para asumir y entender en toda su magnitud que lo que nos están poniendo delante es la realidad, que estamos asistiendo a la intimidad de seres humanos, no de personajes?. Francamente no lo sé. Creo que nos cuesta entender ese privilegio y además estamos un poco anestesiados, nos ha interceptado la ficción.
Tres minutos: una exploración, utiliza la verdad, la pura verdad, como material de partida, una grabación de esa duración, realizada en un pueblo de Polonia en 1938. Un pequeño tesoro descubierto casualmente por su nieto a punto de destruirse. Sabemos que es un pequeño pueblo y que la mayoría de quienes aparecen son judíos, de hecho una sinanoga tendrá un especial protagonismo.
A partir de ahí, se realiza un ejercicio de búsqueda minuciosa que se recoge en esta cinta de poco más de sesenta minutos.
Comienza la búsqueda del lugar, luego de los personajes, la identificación de algunos, también de los acontecimientos que se estaban grabando. Todo entre la incertidumbre y el descubrimiento. Y, en este caso, como bien recalca uno de los participantes, siendo imágenes que nacen para nosotros empapadas de tragedia dado que conocemos lo que les esperaba poco después a quienes sonríen en las imágenes. Triste privilegio.
Nos encontramos ante una obra muy bien planteada y desarrollada, muy rigurosa y transparente en su desarrollo, muy inteligente. Pero francamente creo que su valor va más allá, y se refiere al milagro que nos ofrece el cine en relación con su capacidad para atrapar el tiempo ¿ somos conscientes de que seguimos recibiendo la mirada curiosa y sorprendida de unos niños al borde del holocausto? ¿ no es ese privilegio un gesto de resistencia?.
El cine a veces es muchísimas cosas.
Público
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