216 páginas
"Nueve meses entre cien habitantes".
Llego a este libro por recomendación directa de una amiga, PR. Me lo describió como un libro sobre la vida sencilla, las cosas pequeñas, la contemplación. Me asomé con curiosidad, no ya sólo por el texto en si sino por saber como iba a percibir algo tan diferente. Creo que nuestras neuronas están poco preparadas para la serenidad y la calma.
Suso Mourelo, el autor, recoge en estas páginas un proyecto de nueve meses: vivir en varios pueblos, todos habitados por menos de cien personas, buscando el silencio, la respiración de sus habitantes y ser parte de la cotidianeidad de esos lugares.
Su elección de destinos es plural, un antiguo pueblo minero, una zona de bodegas.... cada lugar con su propia personalidad y sus propios ritmos de vida. Se trata de Aragues del Puerto, Andanzas del Valle, El Centenillo y Higuera de Albalat. Todos en su día vivieron tiempos mejores y ahora luchan por su supervivencia con las pocas personas que perviven desde el pasado y alguna incorporación a la búsqueda de otra forma de vida.
Mourelo cumple con su objetivo de forma rigurosa. Sus textos en ningún caso optan por la facilidad de la crónica del abandono o la rememoración. Busca contar un presente íntimo punteado por la intervención de quienes son por derecho propietarios de los lugares que visita, bien sean estos un zorro, un grupo de mujeres, el río que no cesa de fluir, los compañeros del bar y, por supuesto, el silencio. Como equipaje, libros, como no podía ser de otra manera.
La prosa consigue dibujar perfectamente los contornos y rellenarlos con los colores de la ausencia, la mirada, la paz....Tengo la sensación de descansar en sus palabras y, al leerlas, compartir su viaje. Especial mención también a la cuidada edición.
La conclusión: la lectura se ha convertido más que nunca en experiencia, buscar en las páginas ese refugio que nos recuerda que hay una forma diferente de vivir. Que nos pone delante la grandeza de las pequeñas cosas. Que, en definitiva, nos traslada la grandeza de la vida de forma mucho más sólida que la hazaña de cualquier aventurero.
Lo importante no es para mi tanto lo mirado ( precioso lienzo), como la mirada ¿ seré capaz de entender y aprender ese camino?.
Público
Comentarios