Ingrid García Johnson. Silvia Alonso. Cosimo Fusco. Caterina Murino. Armando de Razza. Nico Romero. Alberto Bang. Enrico Lo Verso. Goize Blanco. Nicolas Illoro.
Alex de la Iglesia consiguió en La Comunidad, trasladarnos que el horror podía estar en lo cotidiano. Desde ese punto de vista, Veneciafrenia ofrecía un material magnífico: hartos de los turistas que destrozan su ciudad, los venecianos han decidido que hay que tomar cartas en el asunto. La turismofobia como base para crear un particular Viernes 13 en un entorno que se empapaba de decadente belleza.
Todo comienza cuando cinco amigos, ejemplo de lo peor dentro de ese viajante poco respetuoso e inculto que afronta su visita a una ciudad milenaria como quien va a un parque de atracciones, llegan a la ciudad de los canales con ganas de juerga. Pronto se verán envueltos en una serie de crímenes que ya ha comenzado a defender la ciudad.
Lo sorprendente en este caso, es la contención de su director. Si en muchas otras de sus películas ha optado por el desmadre, siempre en sus conclusiones y, en algunos casos, destrozando propuestas en inicio interesantes, aquí parece absurdamente tímido. Estoy seguro de que eso desconcertará a su legión de fans que, de todos modos, podrán encontrarlo en algunos destellos como el juego con la marioneta cadáver. Veneciadrenia no es, definitivamente, lo que sus magníficos títulos de crédito anuncian: esa serie B criminal y desmadrada.
Pero además, está el guion. La película está mal escrita. Los materiales son correctos, tampoco se le pide mucho a este tipo de cine, pero están mal equilibrados, y el final el sorprendente en su dejadez. Parece como si todos se hubieran cansado de rodar y quisiesen terminar sin importarles la incoherencia o la banalidad.
No, definitivamente, esta buena producción se ha perdido en su contenido. Nunca he sido uno de los fans de Dela Iglesia pero me cae bien y me gustan algunas cosas suyas. De hecho, los primeros quince minutos de Balada triste de trompeta ( una de las que terminaba desmadrándose ) me parecen sublimes. Pero aquí ha fallado y lo peor es que lo ha hecho cuando tenía todo para hacer una de las películas referencia de su filmografía.
Una pena. Y otra lección: en tiempos en que la experiencia en salas ha perdido fuerza, los fracasos, cuando lo son, son estrepitosos, pero siempre queda la segunda vida en las plataformas. No le deseo nada malo a este director, espero que Veneciafrenia, consiga por lo menos sobrevivir, y eso le ayude a regalarnos en breve otro proyecto a su altura.
Público
Comentarios