Carmelia Jordana. Niels Schneider. Vincent Macaigne. Emilie Dequenne. Guillaume Gouix. Julia Piaton. Jean Baptiste Anoumon. Fanny Gatibelza. Jenna Thiam. Milla Savarese.
Maxime es un joven que aspira a ser escritor y acaba de sufrir un desengaño amoroso. Invitado a pasar unos días en el campo con su primo, para buscar inspiración, a su llegada se encontrará con que su anfitrión ha tenido que ausentarse y deberá de convivir con Daphne, su pareja, embarazada de tres meses.
Con el objetivo de conocerse mejor, ambos comenzarán a contarse sus historias de amor, y esta sinceridad le dará a ese poco espacio de tiempo una densidad difícil de entender, como lo es, en definitiva, el amor entre los seres humanos.
Me gusta mucho el cine literario, ese que se desarrolla como una novela, donde pasan muchas cosas, y en las que tenemos la sensación de que hay alguien detrás narrándonos la historia. Las cosas que decimos.... lo es, acompañada siempre por diversas voces en off con las que los personajes se cuentan entre ellos sus pequeñas historias y, al mismo tiempo a nosotros. En este modelo se construye un pequeño entramado de cuentos encadenados que sólo se permite una pequeña disgresión ( la narración de la pareja de Daphne y su exmujer ).
Pero lo más sorprendente dentro de esa textura literaria es que Mouret apuesta por unas maneras y un contenido clásico, antiguo, que remite a épocas anteriores. Maxime podría ser un Werther, Daphne cualquier heroína confundida en el mapa de sus afectos, el resto de personajes, hombres y mujeres a la búsqueda de algo tan inalcanzable como el amor `perfecto. Y esta película, en definitiva, un canto a aquello en apariencia tan alejado de nuestra vida actual como es el puro romanticismo.
Por lo demás, la caligrafía es delicada, ligera, sacando lo mejor de los paisajes bucólicos donde la ubicación temporal pasa a un segundo lugar. La palabra adquiere una relevancia absoluta, pero también existe una coreografía de gestos y movimientos que van escribiendo un subtexto paralelo a lo que se nos cuenta.
Posiblemente esta hermosa película se pueda considerar arriesgada por ir a contracorriente y probablemente exija un visionado sereno, tranquilo, para el que no siempre estamos preparados. A cambio ofrece una caricia en el corazón, el recuerdo de una forma de vivir que parecía olvidada, y un homenaje a lo que nos hace humanos, nuestra duda, nuestra incapacidad para entenderlo todo, un camino para percibir la riqueza de la existencia.
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