320 páginas
Disponible en ebook
Que difícil es contar un cuento, condensar en un relato, con su brevedad, una buena historia, y que difícil es escribir la vida, plasmar de una forma precisa, el desarrollo cotidiano de una existencia, un trozo, plasmando lo que ocurre y lo que se siente, en la mayoría de las ocasiones lo poco que ocurre y lo mucho que se siente.
Cuando a Alice Munro le otorgaron el Nobel, creo recordar que el jurado reconoció su maestría en el género. Tengo que releer a Chejov para comprobar si está a la altura de la escritora canadiense, a la que descubrí más tarde, pero lo cierto es que me apasiona perderme en sus relates, esas tormentas interiores que transcurren en escenarios corrientes, esas capas que el tiempo va dejando en sus personajes, en forma de recuerdos, de manchas. de aditamentos de su personalidad.
Poco puedo decir de Algo que quería contarte que no haya dicho ya. Quizás que la autora está más cercana a la reflexión de la tercera edad, al descanso cuando las mochilas están llenas. Pero ni siquiera entonces los seres humanos pierden un ápice de su complejidad.
Aquí está de nuevo lo mejor de Munro, una vez más.
Con eso está dicho todo.
Público
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