1000 páginas
Disponible en ebook.
El trueno en el reino cierra la trilogía sobre la vida de Thomas Cromwell. Las dos novelas anteriores, En la corte del lobo y Una reina en el estrado, llevaron a Hillary Mantell a ganar por dos veces el Booker Price. Esta última creo que ni siquiera ha estado preseleccionada. Las otras me parecieron muy buenas, esta me parece la mejor. Y es también la más voluminosa.
Cromwell es sin duda un personaje fascinante en un tiempo histórico único. La corte de Enrique VIII se reconoce como un periodo fructífero y oscuro, donde la política exterior y los caprichos del monarca, convertían la corte en un territorio de estrategias tan elaboradas como imprevisibles. Un juego constante de posicionamiento donde el premio o el castigo era siempre la vida. En ese escenario, es difícil de entender como un hombre nacido en el pueblo, hijo de un herrero, terminó ser el personaje más poderoso del país. Rodeado de miedo, empapado en odio.
Es sin duda complejo. Necesario asumir una inteligencia preclara, y unos objetivos firmes. Pero dudas sobre sus motivaciones. Mantell le otorga un importante componente de justicia religiosa, posiblemente fruto de sus orígenes. Pero también esa fe sumida en la contradicción de haber servido y recordar con admiración al Cardenal Wosley. De todas maneras la autora no dibuja un personaje que incite al rechazo, o no totalmente sin incluir la admiración. Sin duda es imprescindible para entender, asumir lo incomprensible de su existencia.
Sin estar escrito en primera persona, Mantell consigue una vez más que tengamos la sensación de estar dentro de su mente. Es impresionante, y lo era ya en las otras dos novelas, su capacidad para pegar la narración al personaje, a su pensamiento, a sus dudas. Y es desde ahí desde donde se dibuja el entorno y se describen al resto de los personajes, desde la percepción de otro, pero nunca como elemento decorativo.
La prosa de la autora es densa y de una riqueza desbordante. Las mil páginas se hacen cortas, se disfrutan con deléite. Es absolutamente el reverso de la frivolidad presente en tanta narrativa de este género.
Esta trilogía es un empeño literario ambicioso, totémico y conseguido. Un hito ya clásico.
Público
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