NOVELA: LLUVIA FINA de Luis Landero

Tusquets
272 páginas
También disponible en ebook

Luis Landero es una voz única.
De esos novelistas que lo son en una posición coherente y comprometida, con la literatura y con la realidad.
Creo que si tuviese que incluirlo en algún equipo sería en el mismo que Galdós, Balzac, incluso Dickens.
Desde Juegos de la edad tardía no me he perdido ninguna de las piezas de su copiosa cosecha. Ninguna decepciona aunque por supuesto haya algunas más logradas que otras. pero ninguna decepciona. En todas hay una mezcla siempre justa de delicadeza, elegancia, humor y ternura.
Por lo tanto, siempre es una alegría una novela más.
Especialmente como esta.
Lluvia Fina es de las excelentes.
Los relatos no siempre son inocentes, no siempre son indoloros, como las palabras.
Para demostrarlo, Landero crea un personaje central para esta novela coral, una especie de Scherezade invertida que en un lugar de contar historias, las recibe, con la misma incontinencia. Historias que ya han ocurrido, historias que están ocurriendo. Historias que son causa o efecto unas de otras.
Como siempre, Landero es maestro en dibujar personajes complejos, en escarbar en sus sentimientos, en sus inseguridades y sus incongruencias, en su desconcierto. Y como dije antes, lo hace con ternura, porque el autor nunca acusa, siempre opta por la comprensión.
En este caso, y dado que hablamos de historias que se cuentan, el autor crea una ágil e inteligente estructura de diálogos montados, en los que todo avanza perfectamente permitiendo incluso la exposición de distintas versiones del mismo suceso.
En cuanto al contenido, creo que fue Tolstoi quien dijo que todas las familias felices eran iguales, pero las infelices la eran cada una a su manera. Esta es la historia de una familia infeliz. Una de tantas que ha tenido que sobrevivir al hecho de no rozar la miseria, tras la muerte del padre. Y que no ha llegado a curar las heridas que una situación así siempre causas. Tal vez por falta de comunicación, tal vez por que los sacrificios pueden haber sido irregulares y muy dolosos.
Sólo hace falta un pequeño detonante,  en este caso la convocatoria de una celebración, para que todo lo que se creía guardado aflore de nuevo. Y se convierta en una especie de gula deforme , la de querer que el otro que se empaché de verdad.
Lluvia Fina es un cuento triste, con unos niños perdidos que terminan acercándose demasiado a la casa del ogro. De una bruja que tal vez no sepa que lo es. Y de una Scherezade invertida cuyo drama es que escucha cuando nadie quiere escuchar su historia.
Una maravillosa novela.
Una más.
Esperemos muchas.

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