NOVELA: ASESINATO ES LA PALABRA de Anthony Horowitz

Catedra
450 páginas
Disponible en ebook

La novela británica policiaca clásica tiene una textura singular.
El género que inicia la fascinante Casa Desolada de Dickens ( a la que Horowitz cita en este libro ). Continúa con otros grandes autores, especialmente Wilkie Collins. Alcanza su zenit posiblemente con Agatha Christie.
Se conforman alrededor de crímenes que tienen mucho de suceso familiar y de secretos del pasado.
Siempre hay cierto aire gótico.
La escritura es generalmente transparente, el objetivo es que la trama fluya con claridad.
Y, sobre todo, siempre hay una pátina de humor, de un humor que distancia ligeramente, que no busca quizás ni siquiera la sonrisa, sino la empatía.
Con estos mimbres se han creado grandes novelas y otras muy buenas, y, sobre todo, parejas inolvidables:
Sherlock Holmes y Watson.
Hercules Poirot y Hastings.
Tuppence y Tommy....
Lo primero que hay que destacar en la novela que nos ocupa, es la vocación de Horowitz de adscribirse a las referencias autóctonas del género. Sin que pueda tachársele de copia y tal vez tampoco de homenaje, Asesinato es la palabra, podría haber sido escrita hace años  y , salvando anacronismos temporales, por cualquiera de los autores antes citados.
En primer lugar, lo más importante, la trama.
Todo comienza cuando una mujer, de clase social alta, acude a un establecimiento de pompas fúnebres para preparar su propio funeral.
Bueno, la verdad es que comienza cuando esa misma tarde, esa mujer es asesinada.
Es entonces cuando un asesor policial, antiguo agente, acude a visitar a Anthony Horowitz, el autor, sí, aquí autor y personaje, para proponerle que le acompañe en la investigación con el objetivo de escribir un libro sobre la misma.
Una vez más tenemos pareja.
Y en este caso, otra pareja de las que merecen ser recordadas.
Un escritor, el escritor, un intelectual liberal, profesional curtido en diferentes tipos de literatura, incluyendo series de televisión, reconocido en su país y con poca necesidad de complicarse la vida.
Un antiguo agente, muy intuitivo y muy borde. Sin duda muy bueno en su profesión pero lastrado por ciertas actitudes fascistoides.
Juntos conforman un excelente par.
Con ellos, se recorre sin freno esta divertida, entretenidísima e inteligente novela.
Estaba en la selección de libros para llenar agosto. No sabía nada de Horowitz y sólo la excelente crítica en ABC Cultural me lo hizo presente. La verdad es que no lo pensé demasiado y no es lo habitual en mi, que siempre manejo largas listas de lecturas pendientes a los que intento evitar incorporar muchos más.
Una  hermosa  sorpresa de esas que muchas veces se dan entre libros.
Porque lo que me he encontrado es una obra excelente que además me ha llevado a los años en que descubrí que matar es fácil, que de diez negritos puede que no quede ninguno, que la inocencia es trágica en ocasiones o que que temblé con el perro que tenían unos tal Baskerville.
Como me gusta en ocasiones la nostalgia y la de páginas que la habitan.

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