192 páginas
También disponible en ebook.
Un internado en las afueras de París, Vertel, sirve de refugio a un grupo de muchachos , algunos niños ricos abandonados por sus familias , otros con inestables estructuras de apoyo, también con recursos escasos...
Conviven en un ambiente de inocencia y cierta ansiedad, estableciendo amistades desde la transparencia y la necesidad.
Eso es el pasado.
Con esta postal , llena de retazos , Modiano da un paso hacia adelante , aunque sin llegar al presente donde posiblemente sólo se encuentre el narrador , y nos dibuja bocetos que enlazan en gran parte lo que fueron entonces con aquello en lo que se convirtieron después.
Desde una visión nítida, nostálgica , comprensiva y triste, el escritor nos dibuja una sociedad algo enferma, llena de personas que no terminaron de encontrar su lugar . Posiblemente porque muchos de ellos todavía intentaban ser los niños que no les habían dejado ser.
No hay juicios en esta colección de apuntes, relatos pequeños en páginas y grandes en contenido, certeros y sutiles con el pudor necesario para el respeto, dejándonos adivinar los fondos de angustia que podían anidar en cada una de las almas homenajeadas. Porque veo Tan buenos chicos, desde su título, como un punto de homenaje a aquellos que podían haber escalado otras cumbres y que sin embargo sólo serán recordados por su antiguo compañero de internado.
Como he dicho antes , tengo la sensación de que Modiano se mueve en tres niveles temporales:
La época del internado, la de los reencuentros ( o en algún caso fabulaciones ) y el hoy, donde , ya convertido en escritor , y guardián de la memoria, ha decidido mirar hacia atrás. Y son la ternura del autor y su acción de recordar lo que tiñe el conjunto.
Porque la prosa de Modiano tiene siempre una singularidad , la del que contempla desde la distancia pero con infinita sabiduría ( gran parte de esa sabiduría posiblemente esté en su comprensión y su ausencia de juicios ), por eso sus emociones son reales por ser contenidas , por surgir de la verdad y nunca de la necesidad de impactos, por eso también parece que siempre existe una cortina de niebla delante de sus narraciones pero no una niebla que confunde o difumina ya que sus figuras son siempre perfectamente nítidas; jugar con la pureza de herramientas como la memoria y la capacidad de fabular , pueden tener mucho que ver con eso.
Modiano se mueve en el terreno de la evocación, de traer ante nosotros a sus personajes dándoles vida , infundiéndoles aliento.
Creo que este autor es uno de los Premios Nobel más acertados de los últimos años. Sumergirse en su obra es gozar de una inmersión en el pasado reciente de una Europa que comenzaba a perderse , algo que tal vez nos ayude a comprender la actual. Aunque él nunca pontifica . Como buen sabio, también es humilde.
Público
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