Alfaguara
270 páginas
Hay un tipo de novela histórica que no trata de biografías de grandes personajes o recreación de hechos conocidos, sino que se ocupa de mostrar la repercusión de los sucesos en la vida particular y anónima de aquellos que eran meros extras.
En esta novela, Colombia se abre con recuerdos de un Pablo Escobar megalomano y casi mítico , y de todo aquello que, alrededor del narcotráfico, hizo que un país tropical pasase , tras un extraño periodo de incongruencias, a ser el lugar más peligroso del mundo.
Hay aquí mucho de emocional, de sentido, y eso , sumado al buen hacer de su autor, nos regala momentos excelentes ,páginas llenas de pasión y de verdad.
Pero quizás sea esa involucración lo que hace que falle la distancia suficiente para constituir una estructura sólida, y así me da la sensación de que las diferentes piezas y tiempos no terminan de encajar como deberían.
Se atisban líneas de argumentación nuevas en nuestro ( o mi ) desconocimiento, se siente el dolor . Pero precisamente todo eso nos hace desear más.
Supongo que cuando el corazón se utiliza para escribir , a veces juega malas pasadas.
Público
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