NOVELA: PISTOLA Y CUCHILLO de Montero Glez


El Aleph Editores
Del Taller de Mario Muchnik
120 páginas
No conozco prácticamente el flamenco; ahora que se ha convertido en Patrimonio de la Humanidad, me cuesta reconocerlo, pero lo cierto es que soy un absoluto ignorante en esa materia, aunque, como cualquiera con un mínimo de sensibilidad ,puede presentir el alma que se esconde en ese cante.
Para los entendidos, creo que Camarón es una especie de personaje mítico, un ser único que tiene mucho de leyenda , de animal imposible, entrelazado con su faceta humana.
Es dificil aprehender algo así, más que difícil quizás inútil y un poco profano; en casos como este, el biografo debe intentar captar la esencia, algo tan inexplicable como el alma, y para ello sobran muchas veces los datos, pero debe conseguirse algo tan complejo como que al terminar la lectura tengamos la sensación de estar más cerca del heroe.
En este breve relato, donde un encuentro se abre a diferentes momentos del pasado, Montero Glez consigue esa difícil alquimia; y lo hace, por supuesto por la estructura de su relato y su capacidad para integrar la anécdota y el sueño, la presencia y el recuerdo, pero creo que también, sobre todo, por un lenguaje que se acerca a la poesía de lo físico y las metáforas minerales, como de alguna manera, debía ser la esencia del cante de este Orfeo.
Sólo un encuentro, sólo unas pocas frases, pero tengo la sensación de que desde hoy conozco más de Jose Monge, Camarón, ahora buscaré su música, y sé que la escucharé de otra manera.
Público

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